Las horas nuestras.-

Ruta: Buenos Aires -Amsterdam- Todavía Buenos Aires. La manera en que se pasan las horas de nuestras vidas!? Nos sentamos en la misma mesa tantas veces y cenamos lo mismo y nos miramos en el espejo profundamente con la firme intención de sintonizar por donde era que nuestras vidas iban... Y la tortura de saber que aquel ángel que supo ser! es la persona que ya no amamos.- Horas puestas en el asiento del autobús, llendo a trabajar- Sintiéndonos sin darnos cuenta, bien. Y sin darnos cuenta sintiéndonos mal. Tan lejos de acá. Del punto de largada. Del punto de llegada también. De hoy de ayer No hay mañana... Solo hoy y ayer. Me doy cuenta de que esas historias tienen que ser contadas.- Es la mía también. No podemos perderlo o darles todo sin recibir nada a cambio! Por que eso es un robo y no un intercambio de mutuo acuerdo. Alcanzar la atención, distraerlos un minuto! al narrar una pequeña tajada del grito, que no se supo escuchar todavía. Es una tarea completamente imposible la de escribir, narrar, pintar, plasmar en algún arte o actividad, cualquiera sean estas! No se puede superar la realidad con la ficción, La realidad por momentos puede ser tan triste y pesada un domingo o un jueves... O una tarde tranquila y liviana como una siesta en la hamaca... La realidad en la que vivimos siempre se supera a si misma. es inútil escribir guiones, poemas o libros. Por que las historias no escritas son las que deberían serlo. Las historias que nunca veremos mas que en la vida del vecino o en la propia vida familiar o particular de uno, hay que contarlas. Son las que hablan de nosotros como individuos pero somos nosotros. Me doy cuenta. Las historias no escritas son las que deberían serlo, con urgencia...